lunes, 27 de marzo de 2017

La lengua materna: una riqueza cultural incalculable



Una correcta expresión, tanto oral como escrita, es lo que define el nivel cultural de un individuo, aunque muchos no la valoren en su justa medida.


Algunos todavía no han interiorizado la importancia de escribir sin esos errores ortográficos, los que manifiestan un alto grado de mediocridad, porque en estos tiempos, la mayoría dan muy poco valor al adecuado uso de la lengua materna.


Cuando escuchamos frases vulgares o leemos textos con errores ortográficos, nos vence el desaliento, más si por un segundo pensamos que nuestra sociedad se precia de ser, en un futuro no lejano, una de las más cultas del mundo.


La importancia de la lengua materna, nos explica la UNESCO, es una que merece gran reflexión y atención. En primer lugar, las lenguas son de una riqueza cultural incalculable, se trata nada menos que de una forma única de interpretar la realidad, un bien cultural que conjuga identidad, integración social, comunicación.


Hoy el uso de las nuevas tecnologías de comunicación ha dado lugar a verdaderos histerismos ortográficos. Sitios como Twitter, Facebook, el propio Messenger y tantos otros, dan paso a malas grafías por la necesidad de prontitud en los mensajes.


A la par, el empleo de abreviaturas casi irreconocibles en los SMS, en los celulares para ahorrar espacio de caracteres (y saldo), son algunos de los ejemplos clásicos del desastre que hoy padecemos.


Se ha descuidado tanto la ortografía que cualquier profesional puede cometer más de 10 errores ortográficos, en menos de dos cuartillas. Si no prestamos mayor atención al respecto, dentro de poco estará en peligro un aspecto esencial para una mejor comunicación.


En pocas palabras la ortografía cumple una función importante en nuestro lenguaje y comunicación ya que nos ayuda a expresarnos de forma correcta.


viernes, 3 de marzo de 2017

Ganemos terreno en el ordenamiento territorial

En los últimos años, en nuestra provincia, se han tenido que adoptar estrategias, por parte de Planificación Física, de conjunto con otros organismos, para hacer frente a algunas ilegalidades, como la construcción de piscinas, en varios hogares.

Muchas son las suposiciones y especulaciones con respecto al tema, no solo aquí, sino en todo el país; pero lo cierto es que esas acciones son resultado del desconocimiento y la irresponsabilidad.
A pesar de las labores de sensibilización que realizan especialistas del Instituto de Planificación Física en nuestro territorio, la solución al problema generado dista mucho de lo deseado.

En Pinar del Río existe hoy un sector incipiente, que viola lo establecido, esencialmente el vinculado a la actividad por cuenta propia, “alquiler de habitaciones”, los que muchas veces se asocian al turismo.  Estos, para ofrecer mayor confort a sus inquilinos, fabrican piscinas en sus patios.

El municipio en el que más se incurre en esta violación es el de Viñales, donde existe el mayor número, de las 90 piscinas identificadas en el territorio pinareño.

Dos normas fundamentales regulan este tipo de construcción. Por ejemplo el Decreto 327 norma todo lo que tiene que ver con el proceso constructivo e inversionista para personas jurídicas; y el Decreto 322, lo hace para personas naturales.

En cuanto a la construcción de piscinas, tradicionalmente las normativas cubanas han mantenido una prohibición, por todo cuanto implica.

Estas construcciones solo pueden realizarse en obras estatales, dígase hoteles, albergues e instalaciones deportivas que tienen un grupo de requisitos y que pueden garantizar el mantenimiento de las mismas y otros aspectos.

Vale destacar que más que un mero capricho, hoy  el desarrollo de esas acciones y el fortalecimiento de la actividad de la planificación física, se hace necesario para ir ganando en materia de ordenamiento territorial.