martes, 25 de octubre de 2016

Habrá debate en ONU contra el bloqueo a Cuba

Una nueva fecha histórica vivirá el pueblo de Cuba, mañana, muy  similar a la del 27 de octubre del pasado año, cuando sentimos el apoyo casi unánime, al proyecto de Resolución contra el bloqueo, presentado por nuestro canciller, en la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas.

Aún queda en la memoria la concluyente cifra de 191 países que respaldaron la petición cubana, de los 193 miembros de ese organismo internacional. Solo dos votaron en contra -evidentemente los Estados Unidos y su aliado Israel. 

Con la intensión de un nuevo triunfo, el ministro de Relaciones Exteriores Bruno Rodríguez Parrilla, demandará este miércoles, a nombre del pueblo de Cuba, el levantamiento de sanciones unilaterales, cuyos daños económicos se estiman en más de 753 mil 600 millones de dólares.

Al reconocimiento, por parte de Obama, del fracaso de tan infructuosa política contra Cuba, ahora se suma la nueva directiva presidencial junto a un paquete de medidas. Ante este escenario el mundo se pregunta, qué poderosa razón se necesitará para poner  fin al bloqueo económico, comercial y financiero, cuando la comunidad internacional reconoce que, además de excluyente, es criminal.

Aunque sea el Congreso norteamericano, (en la actualidad de mayoría republicana), quien decida eliminar de una vez y por todas esas restricciones, privativas también para los ciudadanos estadounidenses; sabemos que Barack Obama, en su condición de presidente, puede hacer mucho más antes de abandonar la Casa Blanca el próximo enero.

Los desafíos en la relación entre Cuba y los Estados Unidos, continúa existiendo, porque los hechos demuestran que el bloqueo, formalizado durante la gestión del presidente John F. Kennedy está en plena aplicación por el vigor de las leyes, disposiciones y prácticas que le sirven de sustento.

Ya lo han expresado en múltiples escenarios nuestro principales líderes; “la normalización de relaciones entre los Estados Unidos y Cuba tendrá que pasar necesariamente por el levantamiento completo del bloqueo económico, comercial y financiero, por la devolución del territorio que usurpa ese país en Guantánamo, por el cese de las transmisiones de radio y televisión con fines subversivos y la indemnización al pueblo cubano por los daños causados.

Mañana el Proyecto de Resolución será  propuesto a votación, como ha sucedido en todas las celebraciones de la ONU, desde 1992. Una vez más aplaudiremos el respaldo contundente de la comunidad internacional al proyecto.
En lo adelante, como bien expresó nuestro Ministro de Relaciones Exteriores, “mientras exista bloqueo, habrá debate en la ONU”

Habrá debate en ONU contra el bloqueo a Cuba

Una nueva fecha histórica vivirá el pueblo de Cuba, mañana, muy  similar a la del 27 de octubre del pasado año, cuando sentimos el apoyo casi unánime, al proyecto de Resolución contra el bloqueo, presentado por nuestro canciller, en la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas.

Aún queda en la memoria la concluyente cifra de 191 países que respaldaron la petición cubana, de los 193 miembros de ese organismo internacional. Solo dos votaron en contra -evidentemente los Estados Unidos y su aliado Israel-  mientras otros tres se abstuvieron. 

Con la intensión de un nuevo triunfo, el ministro de Relaciones Exteriores Bruno Rodríguez Parrilla, demandará este miércoles, a nombre del pueblo de Cuba, el levantamiento de sanciones unilaterales, cuyos daños económicos se estiman en más de 753 mil 600 millones de dólares.

Al reconocimiento, por parte de Obama, del fracaso de tan infructuosa política contra Cuba, ahora se suma la nueva directiva presidencial junto a un paquete de medidas. Ante este escenario el mundo se pregunta, qué poderosa razón se necesitará para poner  fin al bloqueo económico, comercial y financiero, cuando la comunidad internacional reconoce que, además de excluyente, es criminal.

Aunque sea el Congreso norteamericano, (en la actualidad de mayoría republicana), quien decida eliminar de una vez y por todas esas restricciones, privativas también para los ciudadanos estadounidenses; sabemos que Barack Obama, en su condición de presidente, puede hacer mucho más antes de abandonar la Casa Blanca el próximo enero.

Los desafíos en la relación entre Cuba y los Estados Unidos, continúa existiendo, porque los hechos demuestran que el bloqueo, formalizado durante la gestión del presidente John F. Kennedy está en plena aplicación por el vigor de las leyes, disposiciones y prácticas que le sirven de sustento.

Ya lo han expresado en múltiples escenarios nuestro principales líderes; “la normalización de relaciones entre los Estados Unidos y Cuba tendrá que pasar necesariamente por el levantamiento completo del bloqueo económico, comercial y financiero, por la devolución del territorio que usurpa ese país en Guantánamo, por el cese de las transmisiones de radio y televisión con fines subversivos y la indemnización al pueblo cubano por los daños causados.

Mañana el Proyecto de Resolución será  propuesto a votación, como ha sucedido en todas las celebraciones de la ONU, desde 1992. Una vez más aplaudiremos el respaldo contundente de la comunidad internacional al proyecto.
En lo adelante, como bien expresó nuestro Ministro de Relaciones Exteriores, “mientras exista bloqueo, habrá debate en la ONU”

jueves, 6 de octubre de 2016

Música para el alma, pero en su justa medida

Es cierto que la música es un alimento para el alma. A la inmensa mayoría nos provoca placer; los románticos la aprovechan para enamorar y no hay nada mejor para un día de fiesta.
Pero, también es cierto que solo con un volumen, en su justa medida, es saludable para el ser humano; de lo contrario resulta nociva.

Cuando escuchamos música muy alta no podemos percibir, siquiera, los propios pensamientos.
Hoy a muchos padres les preocupa que sus hijos, no solo la escuchen a elevados decibeles en casa, sino que anden todo el día con audífonos, oyendo reggaetón y todo tipo de melodía, a tan alto volumen.

Claro, este serio problema (porque así hay que verlo), no es exclusivo de los adolescentes; otros no tan jóvenes igualmente lo hacen.
Y es que no todos somos conscientes de que nuestros oídos merecen atención y cuidado. La salud auditiva nos pasa desapercibida, sometiendo a nuestros oídos a un intenso maltrato.
En nuestra sociedad, con el auge de las modernas tecnologías, por mucho que se diga, por más spot publicitarios que se divulguen y más recomendaciones especializadas que se hagan, el fenómeno va en ascenso.

Según estudios realizados por científicos de la Universidad de Buenos Aires, en Argentina;  la música o los ruidos elevados durante la fase de crecimiento pueden acabar afectando la memoria y los mecanismos del aprendizaje.

Ya era conocido que los sonidos fuertes pueden causar alteraciones auditivas, cardiovasculares y endocrinológicas, además de estrés e irritabilidad, pero los investigadores argentinos afirman, que es la primera vez que se detectan (según pruebas con ratones),  cambios morfológicos en el cerebro.

Así que, vivir rodeado de ruidos y sonidos estridentes es algo que puede, a largo plazo, llegar a perjudicar tu salud o la de tus seres queridos. Solo que no existen medidas que sancionen a los que se causan daños a sí mismos, por inconscientes.

Ahora bien, cuando de manera irresponsable el sonido transgrede la tranquilidad ciudadana constituye entonces contaminación sonora, que atenta contra el bienestar de los vecinos y también contra el Medio Ambiente.

La ley que en Cuba sanciona esas transgresiones existe, lo que se necesita es que se aplique como es debido, cuando la situación lo requiera.
La música, debe seguir constituyendo alimento para el alma y no instrumento letal.

lunes, 3 de octubre de 2016

El arte de escribir

Escribir es un arte; por tanto, el mecanismo de la escritura es solo una herramienta y su uso, correcto o incorrecto, habilita o margina. 

Es este un postulado que deben tener muy presente aquellos que, siendo o no artistas gráficos o comunicadores, gustan de colgar  carteles, que lejos de comunicar, nos dejan dudas enormes.

Actualmente cualquier persona se cree publicista, incluso, aquellos que se toman muy en serio que “escribir es hablar sobre papel”, sin tener en cuenta que el lenguaje coloquial exige algo menos de precisión y corrección que la comunicación escrita. 
Tal es así, que hoy encontramos una cantidad alarmante de anuncios con errores garrafales, que distorsionan por completo el sentido de lo que quieren expresar.

Los ejemplos abundan y usted bien lo sabe porque, en más de una ocasión se ha cuestionado, al igual que nosotros, si la persona que lo escribió está adecuadamente alfabetizada; aunque para nadie es secreto que, muchos profesionales han dejado en claro su deficiente ortografía.

Y retomando el tema de los carteles con deficiente ortografía nos viene a la mente un ocurrente suceso, publicado en la prensa nacional, hace ya bastante tiempo…Según el relato, en la puerta de una panadería colgaba un cartel, cuya pésima gramática hacía entender: “el pan es de Hayer”,  cuando en realidad debía decir que el pan era del día anterior, o sea de ayer.

El error ortográfico causó tan falsa expectativa, que la cola, en espera del nuevo producto, jamás tuvo precedente en la historia. Eso sin mencionar lo mal parado que quedó el panadero.
Lo anterior es ejemplo evidente de la confusión que puede ocasionar los errores ortográficos en la expresión escrita.

De ahí lo indispensable de obtener una calidad de redacción tal que nos permita expresar con claridad, con orden y corrección; el uso de un vocabulario adecuado y una ortografía correcta se vuelve fundamental en el empeño de lograr la comunicación que deseamos.

Si no tomamos en cuenta esos postulados indispensables en nuestra lengua, entonces seguiremos cuestionándonos el por qué la ortografía promedio ha ido deteriorándose, a pesar de haber logrado un nivel de escolaridad avanzado en la población.

Y no es que nos hagamos la idea; es lastimosamente lo que abunda y esos carteles que están colgados por doquier no dejan lugar a dudas.