26 de junio Día internacional de la lucha contra el uso indebido y el tráfico ilícito de drogas

El consumo de sustancias que afectan la conciencia y el comportamiento, parece remontarse a los albores de la humanidad, sólo que entonces eran utilizadas para calmar o curar dolencias.

Fue en la década del sesenta, cuando la droga tuvo una nefasta y progresiva caracterización como mercancía de comercialización altamente rentable, superada solo por el tráfico de armamentos, en un mundo regido por las actuales tendencias neoliberales.

A diferencia de las sociedades consumistas, donde las crudas leyes del mercado se priorizan sobre el bienestar individual y social, Cuba adopta medidas regidas por organismos internacionales, para un control estricto de aquellas sustancias de efectos psicoactivos, consideradas estupefacientes o psicotrópicos.

Por ello en la red de farmacias comunitarias y en las unidades asistenciales como Policlínicos y Hospitales de Pinar del Río, las disposiciones para la venta de estos fármacos están orientadas y se verifica su correcta comercialización.

Actualmente 17 fármacos requieren de un registro independiente, procedimiento de control para su distribución, dispuesto por el Centro Nacional para el Desarrollo de la Farmacoepidemiología, del Ministerio de Salud Pública.

Según la licenciada en ciencias farmacéuticas, Miladys Ordaz Humáran, especialista que atiende drogas, estupefacientes y psicotrópicos en la empresa provincial de farmacia y óptica, aún cuando Cuba cumple estrictamente las medidas de control internacional, también nacionalmente se estipulan regulaciones, siempre que sea necesario. 

Todo ello, en correspondencia con la voluntad política del Estado Cubano y el objetivo supremo del Ministerio de Salud Pública de incrementar la salud y el bienestar de todos los cubanos.